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El Roto |
Hay quien sostiene que los regímenes políticos tienen ciclos de duración constante: cincuenta o sesenta años. Los economistas, casi todos, piensan lo mismo a propósito de los hechos económicos. ¿Qué también el “ciclo democrático” ha llegado a su término? Si así fuese tal vez deberíamos estar hasta satisfechos: nada de setenta años, el ciclo de la democracia ha durado ¡más de dos siglos! La globalización ha trastornado fatalmente las cartas de ese juego laborioso y comprometido.
Lo mismo que el socialismo es visto a menudo como un régimen adecuado para los países pobres, así también la democracia comienza a parecer adecuada para los paíse en vías de modernización. Una vez conseguido ese resultado, se diría, el paradigma democrático ya no sirve y es sustituido por otra cosa distinta.
Es probable que los nuevos protagonistas, las nuevas masas, las nuevas costumbres, los nuevos sentimientos sociales, las expectativas y los miedos que el mundo globalizado ha sacado a la luz requieran realmente un modelo político nuevo. Que se trate de una puesta al día de la democracia o de algo dramáticamente distinto es una cuestión que hoy nadie es capaz de prever.
Roma y París, 2013-2015
Raffaele Simone, El hada democrática: Por qué la democracia fracasa en su búsqueda de ideales,Taurus, Madrid 2016